Luna Llena
La luna llena fue testigo silente
De nuestra pasión
De cada beso
y de cada minuto que estuvimos juntos
De cómo nos buscábamos sin vernos y nos amábamos sin afán
De los besos por el cuerpo
y del juego de los dedos en el cabello del otro
y de cómo mientras estabas sobre mi...
me devorabas entre besos
y palabras
De cómo sin saberlo y entrelazados a su luz inerte
nos mirábamos y deleitamos
En una danza que aumentaba nuestros deseos.
A ella, a la luna,
le pedí que si te veía,
te recordara quien fui para ti
De cómo te vi cabalgar un día
bajo su luz, para no verte más.
Aún siento
tu perfume en mi lecho
y recuerdo cómo era tu cuerpo mi deleite
y el mío era el deleite tuyo,
Y ella sin quererlo me recuerda que te perdí y nada puedo hacer:
Solo esperar y ver en ella tu reflejo, mientras te disuelves con el viento
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